Tratamiento actual del tabaquismo
Dr.
Rogelio Pendino
Dr.
Daniel Buljubasich
El tabaquismo debe
considerarse una afección médica crónica caracterizada por la
adicción a la nicotina. En la actualidad se la clasifica entre
las enfermedades psiquiátricas como ocurre con otras adicciones.
No debe esperarse una solución mágica al problema. No hay
pastilla que resuelva esta situación por si misma. Se requiere
una participación activa del adicto en su proceso de
recuperación tomando el rol de agente de cambio de si mismo.
Es importante destacar el
papel de los profesionales de la salud en su totalidad, es
decir, médicos, enfermeros, trabajadores sociales, psicólogos,
odontólogos, etc. para identificar a los pacientes fumadores e
iniciar intervenciones motivacionales para que inicien un
tratamiento para dejar de fumar.
El tratamiento puede dividirse
en: farmacológico y psicológico. Dentro del tratamiento
farmacológico hay 2 grandes grupos, compuestos sin nicotina y
terapia de reemplazo con nicotina (TRN). En el primer grupo se
destacan el tartrato de vareniclina, bupropión y nortriptilina.
Dentro de la TRN se encuentran los parches, chiclets y spray
nasal.
Tratamiento
farmacológico de la adicción a la nicotina
1.- Medicamentos sin
nicotina.
§ Bupropión:
es un antidepresivo, su efecto en cesación tabáquica fue un
descubrimiento accidental, empezó a usarse en hospitales de
veteranos de guerra en EEUU observándose un aumento en la tasa
de abandono del tabaco en forma espontánea. Como efectos
indeseables se mencionan insomnio y ansiedad entre los más
frecuentes. Está contraindicado en pacientes con antecedentes de
convulsiones, pacientes que tomen otros antidepresivos,
relativamente en diabéticos y en adolescentes.
§
Vareniclina:
primera droga diseñada para el tratamiento del tabaquismo. Actúa
a nivel del receptor nicotínico en el cerebro, con un doble
efecto: agonista parcial (similar a la nicotina, pero de menor
potencia) y antagonista (bloquea la respuesta del placer al
fumar). Hasta el momento se han publicado varios estudios que
demuestran su efectividad. Su efecto adverso más importante son
las naúseas, que sólo ocasionalmente motivan la suspensión del
tratamiento.
§
Nortriptilina:
No se usa en la actualidad. No tenemos experiencia con su
utilización.
2.- Terapia de
reemplazo niocotínico (TRN).
La razón para
su uso estriba en disminuir o evitar el síndrome de abstinencia
derivado de la supresión de la nicotina del cigarrillo. Su
potencial adictivo es menor al del cigarrillo, carece de lo
gestual y de lo social y no tiene los efectos tóxicos del humo.
Existen diversas formas de administración: chiclets, parches y
spray nasal. La elección depende del paciente individualmente.
Debe iniciarse exclusivamente luego de dejar de fumar.
Tratamiento
psicológico de la adicción a la nicotina
Estrategias
conductuales (modificación de la conducta)
Consejo
médico. Es la herramienta más simple con la que cuenta el médico
en la lucha antitabáquica. Sólo el 35% de los médicos lo hace,
teniendo en cuenta que el fumador consulta por lo menos 1 vez al
año al médico es una herramienta que no debería desestimarse.
Terapia
psicológica individual o grupal. Su objetivo es enseñar a los
pacientes a pensar de manera racional. Se basa en utilizar
herramientas de apoyo cognitivo-conductual encaminadas a
modificar la percepción y las actitudes del paciente hacia el
cigarrillo y sus efectos nocivos. Habitualmente se realiza en
grupos de apoyo reducidos que se reúnen en forma periódica por
espacio de 4 a 6 semanas con sesiones de aproximadamente 2 horas
de duración, coordinados por un terapeuta. Se utiliza en
combinación con tratamiento farmacológico en la mayoría de los
casos. Incrementa de manera importante las tasas de cesación y
abstinencia.
Cabe destacar
aquí que otras modalidades de tratamiento como la acupuntura, el
láser, la hipnosis, acupresión o electroestimulación no han
mostrado resultados efectivos en el tratamiento del tabaquismo,
por lo que su uso no está recomendado.
En resumen el
tabaquismo es una adicción y comparte con las adicciones su alta
tasa de fracasos terapéuticos, a tal punto que la recaída es una
parte del proceso de abandono. El tratamiento actual debe
incluir terapia psicológica, de preferencia grupal, sumado a
terapia farmacológica, con nicotina, bupropión o vareniclina.
Dr.
Rogelio Pendino
Dr. Daniel Buljubasich
Neumonólogo
Neumonólogo
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