Conclusiones
La sedación es un componente esencial en los pacientes con ventilación mecánica, requiere la valoración y monitoreo de parámetros para detectar el dolor, la sedación y su cuantificación. Existen diversos agentes, los cuales se indican de manera individual de acuerdo a las condiciones del paciente y la presencia de comorbilidades. Las escalas de medición de sedación son instrumentos que tienen un impacto positivo en la precisión y administración de la sedación, evitando una sedación excesiva, reducción de sedantes, medicación analgésica e incluso reducción de medicamentos vasopresores. Es necesario utilizar protocolos de sedación y analgesia adecuados para cada paciente con el objetivo de disminuir el tiempo de ventilación mecánica, reducir los días de estancia en la UCI, además de disminuir algunas complicaciones como neumonía asociada a ventilador, hemorragia gastrointestinal alta, bacteremia, barotrauma, tromboembolia pulmonar y sinusitis. El uso de sedación y analgesia ayuda a disminuir la ansiedad y la agitación del paciente contribuyendo a una mejor evolución.