The Ezetimibe Controversy: Implications for Clinical
Practice
Therapeutic Advances in Cardiovascular Disease - 2 Junio
de 2011.
Comentario: Dr Bruno Paradiso- Docente de la Cátedra de
Clínica Médica, Hospital Centenario; Tutor de Residentes
de la Carrera de Clínica Médica, Hospital Carrasco de
Rosario.
En el año 2004 el panel de expertos ATP III estableció
los objetivos de LDLc para la reducción del riesgo
cardiovascular; se agregó además la categoría de muy
alto riesgo, para los pacientes con enfermedad vascular
establecida y otros factores de riesgo asociados, en
quienes los objetivos de LDLc deberían ser valores
inferiores a 70 mg%, fundamentado en los beneficios
observados en grandes estudios realizados recientemente.
La monoterapia con estatinas, muchas veces no permite
alcanzar dichos objetivos, aún con dosis elevadas de las
mismas, debido a las características propias de estas
drogas así como al riesgo mayor de efectos adversos
(principalmente miopatía y hepatopatía). El ezetimibe
inhibe una proteína específica (NPC1L1) ubicada en el
epitelio intestinal responsable de la absorción de
colesterol. Estudios recientes han demostrado que dicha
proteína estaría inducida por las estatinas
especialmente en dosis elevadas, hecho curioso y que
podría aclarar en parte el techo del efecto de las
estatinas. La efectividad del ezetimibe para reducir el
colesterol ha sido bien demostrada por estudios de buen
diseño, logrando una reducción del colesterol cuando se
asocia a estos fármacos de aproximadamente un 50%, con
una excelente tolerancia.
La pregunta, razón principal de controversia que plantea
esta revisión es si una reducción adicional del
colesterol con ezetimibe en terapia dual, se traduce en
un descenso adicional de la progresión del fenómeno
aterosclerótico y de los eventos cardiovasculares
comparada con la monoterapia con estatina. Se cuestiona
además si el espesor intima-media a nivel carotideo es
un adecuado subrogante de los eventos duros para evaluar
la efectividad de dichos tratamientos. Muchos estudios
han arrojado resultados contradictorios en este sentido
aunque varían en sus diseños, sin embargo están en
marcha algunos que probablemente respondan mejor a estos
interrogantes.
También se desarrolla en esta revisión cierta
controversia que surgió en relación a posible aumento de
casos de cáncer en el grupo tratado con ezetimibe, sin
embargo un metanálisis reciente no encontró que exista
tal asociación.
Si bien no hay evidencia suficiente que avale la
utilidad de esta asociación para reducir los eventos
cardiovasculares de manera adicional está claro el
beneficio de lograr valores más bajos de colesterol LDLc
para reducir el riesgo cardiovascular, por lo cual se
recomienda actualmente el tratamiento dual en aquellos
pacientes que no hemos conseguido los valores óptimos de
colesterol o que no toleran mayores dosis de estatinas.
Khanderia U, Regal R, Rubenfire M, et al. The Ezetimibe
Controversy. Implications for Clinical Practice. Ther
Adv Cardiovasc Dis. 2011; 5(4): 199-208. |