Arsénico en el agua y mortalidad cardiovascular
Comentario: Prof. Alfredo Rovere.
El trabajo que se
comenta a continuación (1) se efectuó en Bangladesh,
donde la concentración de arsénico en el agua de pozo
varía mucho según la zona, lo que les ha permitido
determinar el efecto en un amplio rango de
concentraciones. En ese país hay numerosos habitantes
afectados. Evaluaron la posible asociación entre la
exposición a arsénico y la mortalidad cardiovascular y
si el hábito de fumar cigarrillos (HF) influía sobre la
mencionada asociación.
El estudio fue
prospectivo. Determinaron arsénico en el agua de pozo y
en la orina de las personas estudiadas. Reclutaron
11.746 personas de ambos sexos, que fueron seguidas
durante un período promedio de 6 años. El principal
desenlace (outcome) medido fue la muerte por enfermedad
cardiovascular. De las 460 muertes observadas en el
estudio, 198 fueron atribuidas a causa cardiovascular
(85 debidas a enfermedad cerebrovascular, 71 a
enfermedad isquémica cardíaca, y el resto a distintas
causas cardiovasculares que enumeran en el texto).
En los resultados
encontraron una correlación (relación dosis-respuesta)
entre la concentración de arsénico en el agua de pozo y
la mortalidad por enfermedad cardíaca isquémica y otras
enfermedades cardíacas, incluso ajustado por potenciales
factores de confusión (edad, sexo, HF, educación, índice
de masa corporal y cambios en la concentración de
arsénico en orina después de la determinación de la
concentración basal). Por debajo de 12 microgramos/litro
de arsénico no existía aumento del riesgo; cuando la
concentración de arsénico consumida en el agua era de
12,1 a 62 ug/L, 62,1 a 148 ug/L y 148,1 a 864 ug/L el
riesgo (HR) aumentaba 1,22, 1,35 y 1,92, respectivamente
(p=0.0019; en el artículo figuran los correspondientes
intervalos de confianza al 95%).
En el caso
específico de la enfermedad isquémica cardíaca,
observaron una asociación similar empleando el arsénico
urinario total basal como variable de exposición, lo que
es para enfatizar. Los resultados también muestran una
sinergia de potenciación entre la exposición a arsénico
y el HF sobre la enfermedad cardíaca (el efecto de la
combinación de esos dos factores es mayor que la suma de
sus valores individuales) lo que sugiere que el abandono
del HF más una menor exposición al arsénico, a través de
la provisión de agua aceptable, podrían conducir a una
reducción de la mortalidad cardíaca mayor que la
esperada. Por último, no encontraron una asociación
entre el arsénico del agua de pozo y enfermedad
cerebrovascular, pero sí una asociación entre enfermedad
cerebrovascular y aumento de la presión arterial (las
tablas de resultados muestran que se hizo un minucioso
análisis de los diversos factores de riesgo
cardiovascular en la población estudiada).
En el texto detallan
los criterios de admisión, como evaluaron la causa de
muerte, como midieron la exposición a arsénico, como
midieron las ingestas dietéticas de alimentos comunes,
macronutrientes y micronutrientes comunes, que estudios
estadísticos aplicaron (para el análisis de la
asociación entre exposición a arsénico y mortalidad por
enfermedad cardiovascular o para el análisis de la
sinergia entre la exposición a arsénico y el HF sobre la
enfermedad cardíaca).
En la introducción
comentan los principales efectos del arsénico del agua
sobre piel, cáncer y enfermedad cardiovascular y en el
texto discuten los potenciales mecanismos que
explicarían sus acciones cardiovasculares adversas. La
lectura de esos mecanismos es sumamente instructiva y se
recomienda, ya que los efectos adversos cardiovasculares
del arsénico del agua de bebida están menos divulgados,
tanto entre los profesionales de la salud como en la
población general. Los autores enfatizan que la
enfermedad isquémica y otras enfermedades cardíacas
pueden producirse por exposición a concentraciones de
arsénico mucho menores que las previamente reportadas.
La WHO (OMS) se ha
ocupado del hidroarsenicismo, ha tomado en cuenta el
problema de Bangladesh y publicado recomendaciones (2)
en 2010. Sugiere que en forma provisional sería
razonable suministrar agua con no más de 10 (diez)
microgramos/litro de arsénico, atento a que todavía
existe incertidumbre en la evaluación del riesgo de
carcinogenicidad.
En la revista
British Medical Journal también apareció un Editorial
(3) que comenta favorablemente el artículo de Yu Chen y
colaboradores enfatizando los hallazgos relevantes de
dicho artículo y la necesidad de que en zonas de riesgo
por el contenido de arsénico, el médico averigüe de
donde obtiene el agua cada uno de sus pacientes,
procurando cuando fuese necesario que se determine el
arsénico en el agua y en la orina.
Un interesante
artículo de 2005 (4) en el que trabajaron autores de
nuestro medio, incluyó un mapa de la provincia de Santa
Fe acerca del que se señalaba en el texto "En base a la
información disponible, se elaboró un mapa donde se
delimitan áreas geográficas de acuerdo a tres categorías
de concentraciones de arsénico total: menor a 50 µg/l,
entre 50 y 100 µg/l, y mayor a 100 µg/l (Figura 6 del
artículo). Las concentraciones de arsénico citadas se
refieren a las medidas realizadas en muestras de agua
tomadas en la red de distribución de los distintos
servicios". Incluyeron también otros datos que muestran
el contenido de arsénico en el agua que proveen
distintos servicios a parte de la población (Figura 7),
habitantes no cubiertos por esos servicios, y habitantes
que viven en zonas rurales. Sería útil saber como es la
situación actual (tomando en cuenta que se desarrollan
esfuerzos para suministrar agua con menos concentración
de arsénico) para analizar la mortalidad por enfermedad
cardíaca isquémica, al menos en aquellas personas
fumadoras que están en localidades o zonas rurales en
las que se consuma agua con más de 25 µg/l de arsénico.
Efectivamente, Yu Chen y col. comentan que hay
individuos que pueden experimentar un alto riesgo de
enfermedad isquémica y otras enfermedades cardíacas,
solo cuando están expuestos simultáneamente al HF y a
concentraciones de arsénico de 25.3 a 114 µg/l. Se
comentó más arriba el valor de la medición de arsénico
en orina para estimar la exposición al mismo. Es
necesario considerar que la enfermedad cardiovascular es
probablemente la tercera causa de mortalidad en el
mundo, por lo cual aún un pequeño aumento de dicha
mortalidad por efecto del arsénico más el HF, colocaría
en riesgo de morir por esa causa a un importante número
de personas.
Destaca la
importancia que tiene en nuestro país la exposición a
arsénico en el agua, el artículo de OMS "Preventing
Disease Through Healthy Environments - Exposure To
Arsenic: A Major Public Health Concern" (2): "Drinking-water
poses the greatest threat to public health from arsenic.
Inorganic arsenic is naturally present at high levels in
the groundwater of a number of countries, such as
Argentina, Chile, China, India (West Bengal), Mexico,
the United States of America, and particularly
Bangladesh where approximately half of the total
population is at risk of drinking arsenic-contaminated
water from tube wells."
Referencias
1) Chen Y, Graziano JH, Parvez F, Liu M, Slavkovich V,
Kalra T, Argos M, Islam T, Ahmed A, Rakibuz-Zaman M,
Hasan R, Sarwar G, Levy D, van Geen A, Ahsan H. Arsenic
exposure from drinking water and mortality from
cardiovascular disease in Bangladesh: prospective cohort
study. BMJ 2011;342:d2431
Link:
http://www.bmj.com/content/342/bmj.d2431.full.pdf?sid=7b8f3f66-98f6-43a5-896a-bd31da28077e
2) Preventing Disease Through Healthy Environments -
Exposure To Arsenic: A Major Public Health Concern
2010
Link:
http://www.who.int/ipcs/features/arsenic.pdf
3) Smith AH, Steinmaus CM. Arsenic in drinking water.
Increases mortality from cardiovascular disease. BMJ
2011;342:d2248.
Link:
http://www.bmj.com/content/342/bmj.d2248.full.pdf?sid=7b8f3f66-98f6-43a5-896a-bd31da28077e
4) Vazquez H,
Ortolani V, Rizzo G, Bachur J, Pidustwa V, Corey G.
XXVII Congresso Interamericano de Engenharia Sanitária e
Ambiental. Arsénico en aguas subterráneas - criterios
para la adopción de límites tolerables.
Link:
http://www.bvsde.ops-oms.org/bvsaidis/caliagua/v-090.pdf
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