Tratamiento no específico
Existen
varias modalidades de tratamiento no específico de la
tos. El rol de este tipo de tratamiento es limitado, ya
que debería realizarse la determinación definitiva de la
causa en la gran mayoría de los pacientes, y así
realizar un tratamiento específico.
·
Agentes antitusivos de acción central:
actúan
sobre el centro de la tos, se dividen en narcóticos como
la codeína, morfina y derivados; y los no narcóticos
como el dextrometorfano.
·
Corticoides inhalatorios:
se los utiliza basándose en el hallazgo de que existe
inflamación de la vía aérea en pacientes con tos crónica
aunque no sean asmáticos. No se demostraron beneficios
concluyentes.
·
Bromuro de ipratropio:
agente inhalatorio anticolinérgico que puede aliviar la tos
por al menos dos mecanismos; por un lado bloquea la rama
eferente del reflejo de la tos y por otro disminuye la
estimulación de los receptores de la tos por acción
sobre factores mucociliares.
Recomendaciones acerca del tratamiento no específico de la
tos crónica
La
prioridad es establecer una etiología y dirigir el
tratamiento en forma específica. Sólo en aquellos
pocos casos en los cuales no puede encontrarse una causa
o en los que no existe una terapia disponible, se
debería indicar un tratamiento no específico. Se
recomienda iniciar con un no narcótico (dextrometorfano)
o con ipratropio, y reservar el uso de narcóticos para
cuando los anteriores agentes no resultan eficaces. Pero
como concepto general, no debe abandonarse la firme
intención de diagnosticar la causa de la tos evitando
caer en el facilismo de un tratamiento inespecífico
(jarabe antitusivo) de seguro fracaso. |